Adjectives

Cuando se habla de un sustantivo, describiéndolo y aclarándolo, en inglés, no hay muchos cambios en el adjetivo para hacerlo coherente con el sustantivo.

El adjetivo debe concordar con el género y el número del sustantivo.

Género: Digamos que hay una mujer alta y un hombre alto. En inglés, la palabra «tall», el adjetivo, sigue siendo la misma, incluso cuando se habla de dos géneros diferentes. Esto se debe a que en inglés no hay «sustantivos femeninos y masculinos».

Sin embargo, en español sí los hay. Cuando se habla de un sustantivo femenino (con el artículo definido de “la” o “las” y el artículo indefinido de “una” o “unas”), también hay que hacer coincidir el adjetivo con su género.

Por ejemplo:


Una chica bonita.Una muchacha bonita.
Una playa pequeña.Una pequeña playa.
La preparación físicaLa preparación física.

Lo mismo ocurre con los sustantivos masculinos. Si estás describiendo un sustantivo masculino (con el artículo definido de “el” o “los” y el artículo indefinido de “un” o “unos”), el adjetivo también tiene que ser masculino.

Por ejemplo:


Un chico guapo.Un muchacho guapo.
Un parque pequeño.Un pequeño parque.
La preparación físicaLa preparación física.

Por ejemplo, al describir el color de un perro, digamos que es «marrón», el adjetivo «marrón» no cambia, no importa cuántos perros haya. Un perro marrón sigue siendo “marrón” si hay dos, tres o veinte perros. Serán perros marrones.

En español, sin embargo, el adjetivo cambia en congruencia con el sustantivo. Si el sustantivo es plural, el adjetivo también debe ser plural. Si el sustantivo es singular, el adjetivo también debe serlo.

Si tomamos el mismo ejemplo del «perro marrón» y lo traducimos al español, observaremos que el adjetivo también cambia.

Tanto si se trata de hacer el adjetivo masculino o femenino, singular o plural, normalmente, lo único que cambiará serán las terminaciones de los verbos.


Un pero marrónUn perro marrón.
Unos perros marrones.Algunos perros marrones.

Las mismas reglas se aplican al hablar de la pareja sustantivo-adjetivo femenino plural o masculino plural.


Las mesas rojas.Las mesas rojas.
Unos perros marrones.Algunos perros marrones.

Una excepción a la regla se da cuando hay un adjetivo singular que no termina en “-o” o “-a”, entonces la forma femenina y masculina será la misma al describir sustantivos.

Por ejemplo:


La casa es grande. El cuarto es grande.La casa(f) es grande. El cuarto(m) es grande.

También está el caso del «adjetivo invariable», que significa que es un adjetivo que no cambia de forma.

Aunque lo más probable es que no los encuentres cuando empieces a aprender español, es bueno saber que existen. Normalmente, estos adjetivos se basan en colores poco comunes o palabras que provienen de un ejemplo diferente. Un ejemplo de esto sería la palabra “web”, que es una palabra inglesa que también se usa en español. “La página web” en su forma plural también es “Las páginas web”. Sin embargo, al principio no los verás normalmente, así que no te preocupes demasiado por ellos